viernes, 28 de agosto de 2015

RUTA AL VOLANTE POR ALEMANIA. PARTE III

     Y continuamos con la última parte de la crónica de Alemania al Volante. Ya para acabar, Ulm, Füssen y sus Castillos y Munich.

     Como dije en la última entrada, desde Rothemburg viajamos hacia Füssen, la ciudad mas al sur de nuestra ruta, pero antes, visitaríamos Ulm, la ciudad que vio nacer a Einstein y que tiene la Catedral mas alta del mundo.

ULM

     El tiempo no acompañaba en absoluto en esa mañana, lloviendo intensamente durante algunos momentos en la carretera. Al llegar a Ulm, nada había mejorado, mucho viento, el cielo encapotado y amenaza de lluvia constante. Era tan desagradable el día que lo único que visitamos fue la catedral, parcialmente en obras lamentablemente.

     Ya de lejos, al ir entrando en la ciudad se veía el tercio final de la aguja de la torre, y conforme nos acercábamos por la calle sin ver todavía la catedral, ni saber en qué esquina nos asomaríamos a la plaza, seguíamos viendo el final de la torre. Sin duda impresiona ponerse bajo la torre y mirar hacia el cielo. La entrada en la catedral era gratuita, pero en ese momento se estaba realizando un concierto de órgano, por lo que el tiempo lo aproveché para subir los 768 escalones que te llevan de manera irremediable a una altura de ciento cincuenta metros. 


Un tramo del comienzo de la subida a la torre de la Iglesia.

Vistas desde la torre.

     Abstenerse personas claustrofóbicas o con vértigo, propensas al pánico o simplemente susceptibles de pasar un mal rato en situaciones difíciles. He de reconocer que deberían avisar a todos los turistas dispuestos a subir las escaleras de las condiciones en las que lo harán. Porque la estrechez, la sensación de mareo por la espiral de escalones infinita, el viento y el esfuerzo que hay que hacer para subir pueden jugaros una mala pasada. Eso si, subir hasta lo alto de la torre y contemplar las vistas merece la pena, mas aún cuando al bajar y recuperéis el aliento, sed conscientes de que habréis subido a la torre de iglesia mas alta del mundo.


Sobre el tejado de la torre. Vista del remate final desde su interior.

Interior de la Catedral de Ulm.

     Como os he dicho, el día no acompañaba para nada, así que una vez vista y visitada la Ulmer Münster, era hora de continuar el viaje hacia Füssen.

     Allí el clima seguía en su línea, nublado y amenazante, pero he de decir, que el entorno a los pies de los Alpes con ese clima fresco sin llegar a hacer excesivo frío y una ligera llovizna intermitente era la atmósfera perfecta para ese lugar. Así que sólo quedaba salir a darse un paseo por la pequeña ciudad, ver sus calles, acercarse al paseo paralelo al río y descansar para el día siguiente.

Río Lech en Füssen.


FÜSSEN, SCHLOSS NEUSCHWANSTEIN Y SCHLOSS HOHENSCHWANGAU 

     Quizás muchos ni os suene el nombre del Castillo de Neuschwanstein, quizás lo que si os suene sea su típica foto, o en caso de que tampoco os suene, imagino que alguna película de Disney si habréis visto. Ese castillo...¿ahora si no? Ese fue el Castillo en el que está inspirado el que siempre sale al comienzo de las películas de Disney. 


Vistas del Castillo de Neuschwanstein desde el Puente de Marienbrücke, y entrada principal al Castillo respectivamente.


     Nació en la imaginación del monarca Luis II de Baviera como una pura fantasía romántica de un castillo medieval idealizado. Por algo se le conocía como el Rey Loco. Fue concebido con fines mas estéticos que funcionales, ya que muchas de sus estancias están basadas en actos teatrales, habitaciones temáticas, y en ningún momento fue construido para albergar o recibir a la corte. Tanto éste castillo como el de Hohenschwangau se encuentran a unos diez minutos en coche. Una vez llegas al centro de visitantes donde puedes comprar tus entradas para los castillos, te encuentras con las distintas paradas de autobuses y carros tirados por mulas que te suben hasta el castillo del Rey Loco, aunque si te apetece caminar, puedes subir andando por el sendero hasta los pies del castillo. En nuestro caso, esta opción la dejamos para la bajada. Cogimos el autobús que te deja cerca del Puente de Marienbrücke, desde allí, tendréis una vista inmejorable del Castillo (si sois cabras montesas y ascendéis por la montaña seguro encontráis una vista mejor). Eso sí, abstenerse las personas con vértigo, porque el suelo es de rejilla y veréis la catarata bajo vuestros pies. De ahí, retrocediendo unos metros sobre vuestros pasos os dirigiréis ya hacia el castillo, si no tenéis intención de visitar sus estancias, sabed que podéis al menos pasar hacia su patio principal y verlo desde dentro.


Castillo de Neuschwanstein y Castillo de Hohenschwangau respectivamente.


     Merece mucho la pena admirar el paisaje desde cada mirador, esquina, sendero o resquicio que la naturaleza os abra. Al bajar, pasamos de largo por el Castillo de Hohenschwangau, no es que no nos diera tiempo, tan sólo que optamos sólo por ver el mas importante y aprovechar el tiempo para  ir a comer y gastar la tarde en pasear de nuevo por las calles de Füssen. Era el último día en Füssen, y de verdad que por el sitio, la naturaleza, el entorno en general, me hubiera quedado mas tiempo allí. Pero era hora de partir a Munich. Quedaba un último regalo esa noche, la luna sobre los Alpes. Una imagen para no olvidar.

Luna sobre los Alpes, en Füssen.


MUNICH

     Ya estamos en las dos ultimas noches del viaje. Ya dejamos el volante y pasamos a modo peatón para todo el tiempo que nos quedaba. Tras pasar por todas las ciudades anteriores y a pesar de que en todas había cantidad de turistas, se notaba que estábamos en una ciudad muy grande, con un ambiente totalmente diferente, mas bullicio (del bueno), mas tiendas, mas ajetreo, "mas de todo". 

     Para cualquier persona que decida visitar la ciudad, debería tomar en consideración Marienplatz como punto de partida. Comparando, sería como hablar de la Puerta del Sol en Madrid. Con una boca de metro justo en la Plaza de la que asomas y va apareciendo ante ti el Nuevo Ayuntamiento, cuando miras a tu derecha ves el Antiguo Ayuntamiento, tras de ti se erige la Iglesia de San Pedro o Peterskirche, y en medio de todo, un no parar de gente que camina, se para a fotografiar, tiendas, bares, etc...

Nuevo Ayuntamiento en Marienplatz.

     Una vez nos hemos calmado y centrado de nuevo, tenemos varias opciones, o bien subir a la torre del Nuevo Ayuntamiento, o bien subir a la torre del Viejo Ayuntamiento, donde se encuentra el museo de juguetes antiguos, o bien subir a la torre de la Iglesia de San Pedro. Ya puestos a subir torres, yo os recomiendo que subáis a la de San Pedro, aunque no lo hice, pero se que las vistas desde allí son las mas recomendables. 

Detalle de Mariensäule en Marienplatz.

     Tras salir de la Marienplatz en dirección el antiguo ayuntamiento, salimos a Viktualienmarkt, un mercado de alimentos donde mas de ciento cuarenta vendedores ofrecen fruta, flores, queso y otros productos. Y justo en su centro, un biergarten para sentarte a comer, beber y disfrutar del ambiente. 

Detalle en Viktualienmarkt.

     La verdad es que en Munich nos acompañó la suerte. De camino a Odeonplatz, al pasar por la Bayerische Staatsoper, o lo que es lo mismo, la Ópera de Munich, nos encontramos controles de seguridad por todas las calles para acceder a esta plaza. Resulta que coincidimos con el único día del año en que se celebra el día de la ópera para todos, permitiéndose a todo el público que lo desee, tomar asiento sobre el suelo de la plaza (todo el mundo se llevaba su esterón de plástico) y contemplar la ópera de ese día que se proyectaría en una pantalla gigante. Igual que aquí que eso sólo se hace cuando hay un partido de fútbol. 

     Al continuar hacia Odeonplatz nos encontramos con un festival gastronómico de vinos, quesos y comidas típicas que ocupaban tanto la propia plaza como el patio interior de la Residencia de Múnich, un palacio contiguo a la plaza, pero como todavía no era hora de cenar, justo al lado, hay unos jardines por los que se puede pasear agradablemente y sentarte a descansar en uno de sus muchos bancos. Ocupa el centro del jardín una pequeña cúpula llamada Dianatempel, o Templo de Diana. 

Una fuente en Hofgarten, al fondo el Dianatempel.

     Volviendo a Odeonplatz, la plaza del Odeón que os he mencionado anteriormente, sería absurdo haber desaprovechado la oportunidad de cenar en ese lugar. Así que eso hicimos. Pero al volver, aún quedaba un último regalo. Era ese el día de la Blue Moon que se alzaba sobre la torre del antiguo ayuntamiento. Como veis, un día muy completo y con mucha suerte.

La Luna Azul se escondía tras el Antiguo Ayuntamiento en Marienplatz.

     Al día siguiente, el plan era de nuevo salir desde Marienplatz, esta vez para tomar un camino distinto, dirigirnos hacia una de las antiguas puertas de la ciudad, hacia Karlstor. De camino visitamos la Catedral de Munich, la Frauekirche (este nombre os suena ya ¿verdad?). Su interior es uno de los mas grandes de Alemania, pudiendo albergar en su interior veinte mil personas. De lo más destacable es la tumba mausoleo de Luis IV del Sacro Imperio Romano Germánico.

     Continuando hacia la puerta Karlstor, al llegar, descubrimos que estaba en obras. Mala suerte, así que de vuelta sobre nuestros pasos hasta Marienplatz y desde ahí hasta la famosa cervecería Hofbräuhaus, que está también muy cerca. 

     Como dije, Marienplatz es un punto de partida perfecto para visitar la ciudad.

     Un sitio que no deberías dejar de visitar si el tiempo del que disponéis os lo permite, es Olympiapark. Construido para los JJ.OO de 1972, actualmente es un pulmón verde de mas de trescientas hectáreas de extensión. Es curioso que tras la Segunda Guerra Mundial, la mayor parte de los escombros de la ciudad fueron llevados a la zona del actual parque, pasando a convertirse en las colinas del parque. Como es de suponer, el parque cuenta con numerosas instalaciones deportivas, así como actividades de ocio para todos los públicos. Es un lugar perfecto para pasar el día, relajarse y disfrutar de las vistas, o tirarse al ocio en cualquiera de sus actividades. No os faltarán senderos para caminar.


Visión general del Olympiapark desde un mirador, y Olympiaturm respectivamente.


     Y hasta aquí llegó el viaje. 7 noches y 8 días de ruta al volante, visitando unos pueblos, ciudades, lugares, monumentos, edificios históricos y paisajes para no olvidar.

     Espero que os haya gustado esta crónica, o que quizás os haya servido en caso de que os animéis a visitar algunos de los lugares que os he enseñado. 

     Gracias a todos por leerme y por vuestro tiempo. 

jueves, 27 de agosto de 2015

VUELTA A ESPAÑA A SU PASO POR SEVILLA

     Ayer Miércoles 26 de Agosto se celebraba la quinta etapa de la Vuelta a España. Con salida en Rota y llegada en Alcalá de Guadaira durante el recorrido haría su paso por el centro de Sevilla, entrando desde Bellavista, pasando ante los Jardines de Maria Luisa dirección al Prado de San Sebastián y girar por Luis Montoto hasta la Avenida de la Paz y continuar ya dirección Alcalá. 

     Aprovechando la ocasión, me quise acercar a verla. Era consciente de que en un punto tan cercano a la meta, los posibles escapados estarían muy pegados al pelotón y que todo el grueso de la carrera pasaría a gran velocidad y en apenas un par de minutos con suerte. Aún así, quise ir, ver de cerca el pequeño ambiente y las ganas por parte de publico de ver a los ciclistas. Evidentemente, el ambiente no es comparable al que se pueda sentir en un puerto de montaña, pero aún así, pasando tan cerca por la ciudad, no quise dejar pasar la oportunidad. 

     Tras pasar la caravana publicitaria, al cabo de media hora aproximadamente comenzó a llegar la escolta de agentes de la Guardia Civil, que velan por la seguridad de la carrera, haciendo sus oportunas comprobaciones de seguridad y desplegándose debidamente para controlar y señalizar posibles puntos peligrosos de la carretera. Los siguientes en llegar fueron algunos coches de apertura de carrera, seguidos por algunos agentes mas de tráfico de la Guardia Civil y ya sí el primero de los corredores en solitario, seguido a pocos segundos de un par de ciclistas mas y en no mas de treinta segundos aproximadamente el grueso del pelotón en bloque, apurando en las curvas a una gran velocidad. Es emocionante verlo de tan cerca.

     Lo dicho, en apenas un par de minutos me había pasado al completo la vuelta por delante. Pero ha merecido la pena acercarse a verla.






lunes, 24 de agosto de 2015

RUTA AL VOLANTE POR ALEMANIA. PARTE II

     Retomamos el viaje donde lo dejamos...terminando el día en Heidelberg.

     A la mañana siguiente, el plan era visitar Wulzburg por la mañana para continuar hacia Rothemburg a la tarde, pero, las previsiones de lluvia chafaron la ruta. La duda era, hacer mas kilómetros al volante para visitar una ciudad que probablemente no podríamos disfrutar por la lluvia y el mal tiempo, e ir incómodos, o poner rumbo a Rothemburg ob der Tauber directamente y aprovechar el día completo allí. 

ROTHEMBURG OB DER TAUBER

     Pues esa fue la opción. Ir directamente hacia Rothemburg, y mereció la pena hacerlo. El clima estaba ligeramente mejor que el día anterior, con nubes y viento, pero con un cielo algo mas azul. La verdad es que prácticamente todos los días hemos estado al filo de pasar frío o estar a gusto. Pero he dedecirlo, a mi la climatología me ha ayudado a conseguir las fotos que he hecho, el viento a veces era molesto, pero otras era lo suficientemente fuerte como para mover las nubes y facilitarme el efecto seda que quería en ciertas fotografías de larga exposición. No me quejo.

     La ciudad, o mejor dicho, su casco histórico, apenas llega a los ochocientos metros de ancho por cada uno de sus lados, lo cual hace que recorrerla a pie sea bastante sencillo, teniendo todos las plazas, monumentos y lugares emblemáticos a un tiro de piedra. 

     La particularidad de esta ciudad medieval es que está totalmente amurallada, conservando todo su perímetro defensivo, pero lo mejor sin duda es que todo ese perímetro se puede recorrer. Se puede subir a la muralla y recorrerla como lo hicieran los soldados en su día, asomándote hacia el exterior por sus huecos, y contemplando la ciudad en el interior.

Vistas desde la muralla

     Como he dicho antes, todo está a tiro de piedra. Tal es así, que si nos situamos en Marktplatz, mirando hacia el Ayuntamiento, veremos detrás la torre de la St-Jakobs-Kirche o Iglesia de Santiago, y si giramos hacia nuestra izquierda, al fondo de la calle que vemos a poco mas de doscientos metros vemos uno de los lugares mas fotografiados de la ciudad, Plönlein, un conjunto formado por una delgada casa con una pequeña fuente situada entre dos torres, la Torre Kobolzell y la Torre de Sieber.

Marktplatz

Interior de St-Jakobs-Kirche

Plönlein

     Aún teniéndolo todo cerca y a mano, la tarde, tras comer y reponer energías decidimos aprovecharla para descansar de cara al día siguiente.

BAMBERG Y NÜRNBERG

     A la mañana siguiente tocaba visitar las ciudades de Bamberg y Nürnberg y regresar a Rothemburg donde aún hacíamos noche.

     En Bamberg, a pesar de estar poco tiempo, fue el necesario para disfrutar de la ciudad y acabar encantados con su estética. El lugar mas destacado sin duda, es el antiguo ayuntamiento, enmarcado entre dos puentes sobre un embravecido río Regnitz. 

Altes Rathaus



     También cabe destacar la Kaiserdorm SS. Peter und Paul un St. Georg, o lo que es lo mismo, la Catedral Imperial de los Santos Pedro y Pablo y Jorge. Resumiendo, la Catedral de Bamberg, una imponente iglesia de estilo románico gótico sobre una alta colina que domina toda la ciudad. En su interior, ademas de las tumbas emblemáticas del emperador Enrique II, fundador de esta Iglesia, y las tumbas de muchos arzobispos de la ciudad, destaca la escultura del Jinete de Bamberg o Der Bamberger  Reiter, una figura de la que se desconoce a quién representa, aunque existen varias hipótesis que dan nombre al jinete. Tan icónica es esta figura, que en el año 2012, centenario de la Catedral, Playmobil lanzó una figura del Jinete para conmemorar esta efeméride. Como era de esperar, me llevé mi playmobil de recuerdo. De ahí, a Nürnberg.

Cripta en el interior de la iglesia.

Tumba de Enrique II y su esposa.



     Nürnberg, me recordó en un primer momento a Rothemburg, pero a lo grande. Digamos que Rothemburg es un pueblo, y Nürnberg se ve claramente que siempre ha sido una gran ciudad desde sus orígenes. Con un centro histórico que aunque no conserva gran parte de sus murallas, geográficamente sobre el mapa se ve claramente delimitado, se hace mas complicado recorrerlo a pié. Con un ancho cercano a los dos kilómetros por cada lado y atravesado justo por su centro por el río Pegnitz, si el mismo que pasaba por Bamberg.

     Aunque tiene mucho que visitar, como en los viajes hay que ser selectivos, optamos por visitar su zona central y mas destacable. Aun habiendo aparcado cerca del río, dejamos éste para el regreso.

     El Castillo Imperial o Kaiserburg, fue el primer monumento a visitar. Un formidable castillo que domina toda la ciudad desde la colina. Merece mucho la pena subir a la fortaleza, y aunque no se visite el Castillo si no se dispone de mucho tiempo, merece como digo la pena asomarse desde sus murallas y contemplar la ciudad desde lo alto y por un momento imaginar lo que fue en su día. 


Exterior e interior respectivamente del Castillo.


Panorámica desde los muros del Castillo.

     Muy cerca del Castillo a escasos cinco minutos de paseo encontramos la Casa de Alberto Durero, colindante con un resto de la muralla de la ciudad. Se encuentra prácticamente tal y como la habitó el artista. Suelos, techos y vigas de madera que crujen al pisar, con recreaciones e instrumentos originales en varias de las estancias de la casa.

Interior de la Casa de Alberto Durero.

     Tras dejar atrás la casa del pintor y dirigirnos de nuevo hacia el centro de la ciudad, pasando por Sankt Sebaldus Kirche camino de Hauptmarkt donde se encuentra una de las Iglesias icónicas de la Nürnberg, la Iglesia de las Mujeres o Frauenkirche. Si vais por Alemania o habéis ido, no os resultará extraño que en distintos lugares suela haber una iglesia denominada así y como su nombre indica, era antaño una Iglesia para mujeres. 

     A pocos metros en dirección al río, está otra de las estampas típicas de la ciudad, el antiguo Hospital del Espíritu Santo sobre el río. Ese fue el momento perfecto para descansar, hacer las últimas fotos de la ciudad y regresar a Rothemburg. Allí ya apurando las últimas horas del día, fuimos a cenar a un Japonés bastante recomendado (y con razón)y recorrer por última vez, ya de noche, sus calles medievales.

     Al día siguiente tocaba viajar hacia Füssen pasando por Ulm de camino.

miércoles, 19 de agosto de 2015

DÍA DE LA MUNDIAL DE LA FOTOGRAFÍA

     Desde que el mundo es mundo, como se dice comúnmente, el ser humano ha buscado plasmar de alguna manera la realidad que tenía ante sus ojos, ya sea mediante pinturas rupestres, mediante ilustraciones, dibujos, pinturas, y...fotografías.

     Ya en la antigua Grecia, Aristóteles y Euclides entre sus muchos pensamientos, tuvieron lugar las primeras teorías sobre rayos luminosos. Teorías que en el siglo X d.C fueron desmentidas por el físico y matemático musulmán Alhacén, escribiendo el primer Tratado Óptico en el que demostraba que los rayos luminosos iban desde los objetos a los ojos, argumentándolo a través de experimentos y una detallada descripción del ojo humano. Fue el primero en descubrir los principios de la camara oscura, construyendo un cajón con un pequeño orificio en una de sus paredes que al ser atravesado por un rayo de luz proyectaba una imágen invertida del objeto exterior. Eso ya nos va sonando ¿verdad?.

     La primera descripción completa e ilustrada sobre el funcionamiento de la cámara oscura, así como su uso como instrumento auxiliar para el dibujo, apareció en los manuscritos de Leonardo da Vinci. Estamos en el siglo XV, quizás el comienzo de una evolución hacia la aparición de la fotografía tal y cómo hoy la conocemos. 

     Tres siglos después, Guilles-Louis Chrétien inventa el fisionotrazo, considerado como uno de los precursores manuales de la fotografía. Del mismo siglo es el silueteado, nombre derivado del ministro de hacienda de Luis XV, Ethienne Silouetthe.

     Hasta aquí, y resumiendo mucho la historia se puede constatar lo dicho en el primer párrafo, que el ser humano lleva buscando plasmar aquello que tenía ante de sus ojos de la manera mas fiel posible desde sus orígenes. Los continuos experimentos, estudios, la propia evolución, el conocimiento y los avances científicos y tecnológicos y sobre todo la inquietud por llegar a ese fin, son los ingredientes que hicieron posible que naciese la fotografía.

     Hoy, y desde 1991, se celebra el Día Mundial de la Fotografía, por ser hoy hace ya ciento setenta y seis años, en 1839, el día que vió la luz el primer procedimiento fotográfico. Aunque sería injusto conceder todo mérito a quién le dió nombre, Louis-Jacques-Mandé Daguerre.

     Deberíamos antes remontarnos bastantes años atrás, al año 1726, cuando el alemán Johann Heinrich Schulze descubre que las sales de plata oscurecen por la acción del sol mientras replicaba otro experimento de 1674. Los triste es que tras ese descubrimiento, y al continuar investigando, Shulze no le diera demasiada importancia, por tanto, aunque se le puede considerar el primer creador de fotogramas, en su día no se le reconoció su trabajo para la fotografía.

     Tendremos que esperar al año 1826 para que Joseph Nicéphore Nièpce consiguiera la que es considerada la primera fotografía permanente de la historia. No contento con eso, siguió investigando hasta que sus estudios y hallazgos llegaron a oídos de Jacques Daguerre, quien interesado no cesó en escribir y visitar a Nièpce para convencerle de que se asociaran. Viendo que sus intentos resultaban inútiles, se lanzó a la investigación por su propia cuenta.

Heliografía tomada por Nièpce en 1826


     Ya por fín el 14 de diciembre (algunas fuentes creen que el 5 del mismo mes) de 1829, Nièpce, motivado por su crítica situación económica accedió a formar la asociación que tanto ansiaba Daguerre. Ésta sociedad reconocía que Joseph Nicéphore Nièpce "había encontrado un nuevo procedimiento para fijar, sin necesidad de recurrir al dibujo, las vistas que ofrece la naturaleza", reconociendo por tanto su condición de inventor. Pero tras fallecer éste en 1833, debido a la maltrecha economía del hijo de Nièpce, quien era por contrato el heredero de los derechos, y tras una serie de modificaciones en el mismo, finalmente fue el nombre de Daguerre el que apareciese como único creador del invento.

     Durante los años siguientes, Jacques Daguerre se esforzó en perfeccionar el procedimiento, publicando en 1835 sus primeros resultados del proceso que llamó Daguerrotipo. Consiguió grandes avances, reduciendo el tiempo de exposición de las fotos a 15 o 30 minutos. 

     Hasta que finalmente en el año 1838, probablemente abril o mayo, consiguió la que se cree que es la primera fotografía de personas vivas. La imagen muestra el Boulevard du Temple parisino. Aunque no lo parezca, era una de las calles mas concurridas de la ciudad, pero la velocidad del movimiento de personas y carruajes, unido al tiempo de exposición de aproximadamente diez minutos  impide que se aprecia silueta alguna, salvo un caballero de pie al que un limpiabotas le está limpiando el calzado. Según una investigación de Shelley Rice, el limpiabotas y su cliente eran actores ubicados allí por Daguerre, quien previamente habría tomado otra foto del lugar notando que era imposible que saliese reflejado nada que no estuviese quieto durante toda la exposición de la fotografía.

Daguerrotipo. Boulevard du Temple 1838

     Durante los años 1838 y 1839, Daguerre se dedicó a promocionar el invento por diversos medios, como su intento de crear una sociedad de explotación por suscripción pública que fracasó. Gracias a sus actuaciones logró contactar con François Aragó, diputado del gobierno, quien logró presentar el invento el 7 de enero de 1839 en la Academia de las Ciencias y Bellas Artes de París. Del mismo modo, meses mas tarde, el 14 de junio de 1839, consiguió que el Gobierno Francés comprase su invención, atribuyéndole a Daguerre una pensión anual vitalicia de seis mil francos, y cuatro mil francos anuales al hijo de Nièpce, Isidore.

    En ese mismo mes de junio, el día 22, Daguerre firmó un contrato con dos fabricantes para que produjeran su cámara y los accesorios necesarios, su cuñado Alphonse Giroux y la Maison Susse Frères (Hermanos Susse).

     Aquí llega la fecha clave, el 19 de agosto de 1839, tras haber comprado el Gobierno Francés la invención,  deja libre la patente para que todo el público tuviese acceso a esta nueva tecnología. Numerosos periódicos se hicieron eco de la noticia, y publicaron el procedimiento a seguir. Nacía la fotografía.

     Daguerre aportó el lado mercantilista a la fotografía, y pese a los defectos del procedimiento, en un año se hicieron en la ciudad de Paris 500.000 daguerrotipos. Tanto Alhponse Giroux como los Hermanos Susse eran los únicos fabricantes que poseían el permiso para construir la Daguerrotype. Ambas cámaras eran de similares características. Pesaban alrededor de 5 kilos y requerían de una exposición de 15 a 30 minutos. Todas llevaban la firma del fabricante y estaban numeradas. Las cámaras fabricadas por Giroux costaban 400 francos y la de los Hermanos Susse, 350 francos. En la actualidad se conservan quince Daguerrotypes fabricados por Giroux y tan sólo una por los Hermanos Susse.


     Daguerre logró un reconocimiento unánime por todo el mundo, recibiendo nombramientos de academias extranjeras y condecoraciones francesas y extranjeras, ocultando los verdaderos logros de Joseph Nicéphore Niépce como predecesor de sus investigaciones. Poco a poco la verdad se fue conociendo y finalmente acabó reconociendo las aportaciones de Niépce.

     Por tanto sería injusto celebrar este día sin conocer al menos algo de la historia que sucedió y ser conscientes de que la fotografía no es resultado del invento de una sola persona, sino de los incansables esfuerzos de todos cuanto han investigado para conseguir resultados mejores, sirviendo de base a nuevos estudios que nos han permitido evolucionar y mejorar hasta llegar a nuestros días. 

    NOTA ACLARATORIA: He procurado ser bastante minucioso en el proceso de documentación para escribir este artículo ya que existe cierta discordancia de fechas claves según las páginas y documentos consultados. Tratando así de ofrecer una información lo más exacta posible. 

lunes, 17 de agosto de 2015

RUTA AL VOLANTE POR ALEMANIA. PARTE I

Hola de nuevo a todos. En la última entrada del blog os hablé de Instagram y de lo mucho que me estaba gustando últimamente,  es más,  incluso os animé a que le prestaseis más atención. 

Si lo habéis hecho, sabréis entonces qué he hecho y por dónde he estado estas semanas atrás. Si no lo sabéis os lo digo.

Alemania. Ese ha sido el destino. Una ruta al volante que comenzó en Frankfurt, eso sí,  sólo para bajar del avión y coger el coche, y que terminó en Múnich.

Así que una vez acabadas las vacaciones, y de vuelta al trabajo, toca mostraros en fotos cómo ha sido la experiencia, que de resumirla en una sola palabra, sería: INMEJORABLE.

Os imaginaréis que ocho días de viaje acaban pesando al cuerpo, así que elaborar un resumen y haceros leerlo todo en una sola entrada puede que os resulte más cansino aún. Por tanto, tendréis un par de artículos escalonados para que no os canséis de leer.


Primer Destino. HEIDELBERG

     A una hora y poco de Frankfurt, se encuentra la ciudad de Heidelberg, situada en el Valle Rhine Rift y atravesada por el Río Neckar. Heidelberg tiene el honor de ser la ciudad Universitaria mas antigua de Alemania, posee la Universidad de Heidelberg, fundada en 1386 y está entre las más antiguas de Europa. Por las fechas en las que he estado, es evidente que no había ni rastro de ambiente universitario.

     Lo más destacable de la ciudad, es su castillo, que realmente es una ruina, de hecho, es la ruina más famosa de Alemania. El palacio ha sido reconstruido sólo parcialmente desde que fuera derruido en los siglos XVII y XVIII. Se encuentra a 80 metros en la ladera septentrional del Königstuhl, y por lo tanto domina la vista de la vieja ciudad. Se puede subir a el andando a través de un camino o mediante escaleras, o bien gracias al funicular Heidelberger Bergbahn que va desde el Kornmarkt de Heidelberg hasta la cumbre del Königstuhl.

     La estructura más antigua data de antes del año 1214 y más tarde fue ampliada a dos castillos hacia 1294. En 1537, un rayo destruyó el castillo superior. Las estructuras actuales habían sido ampliadas en 1650, antes de los daños causados por guerras e incendios posteriores. En 1764, otro rayo destruyó algunas secciones reconstruidas. No hace falta que os imaginéis las vistas, éstas eran.
Vistas de Heidelberg desde el Castillo

     De nuevo abajo en su centro histórico, pasear es muy cómodo. Básicamente una calle peatonal central recorre la ciudad. En ella se encuentran algunas iglesias y edificios históricos por el camino, hasta llegar a Marktplatz, donde podremos ver dos de sus edificios más emblemáticos, la Heiliggeistkirche, o Iglesia del Espíritu Santo, y a escasos metros la Haus Zun Ritter, actualmente un hotel. 
Hauptstrasse

Heiliggeistkirche, visto desde Marktplatz

     Desde allí, por una de las calles contiguas, es perfectamente visible una puerta antigua de la ciudad, que se conserva y da acceso al viejo puente, Brückentor.

Puente Viejo, al fondo Brückentor

     De aquí, tocó irse a descansar, poco más que contaros sobre Heidelberg.

Panorámica de la ciudad sobre el río Neckar. A la izquierda el Castillo, y a la derecha el Puente Viejo.

     PD: no pretendo ser una guía de viaje ni detallaros cada movimiento, sólo es mi particular visión de cada destino visitado. Gracias por vuestro tiempo.